lunes, 26 de julio de 2010

La ciudad está paralizada, los vagabundos están escondidos, la gente se encierra en sus trabajos, los charcos se comen los autos.

La lluvia, única presencia en las calles.

Niños jugando videojuegos viejos, tan viejos que fueron creados cuando los papás eran niños. Los juegos modernos ya aburren porque los acabaron, jugar varias veces es aburrido, mejor empezar a descargar juegos viejos por internet. Sin embargo, se aburren muchísimo más, los gráficos exigen demasiada imaginación. Los niños quieren salir, pero no pueden. Graniza, relampaguea afuera.

Decenas de jóvenes encuerados, no para nadar a gusto en las inundaciones de pasos subterraneos, sino para protestar y salvar el agua estancada en el Golfo de México.

Viejos que recuerdan como de niños jugaban fútbol bajo la fuerte lluvia.

Lluvia, lluvia, lluvia, ¿cuándo parará de llover? Es una ciudad de habitantes que no quiere mojarse.